En el corazón de los Altos Pirineos, encrucijada de las principales zonas pirenaicas, las cuatro estaciones de esquí, al final de la pista verde, una ruta muy apreciada por los cicloturistas, Pierrefitte-Nestalas, un pequeño pueblo de 1200 habitantes, alberga el Grand Hôtel de France. Fueron necesarios cinco años de trabajo para revivir este establecimiento construido en 1903 y preservar el carácter, el sello del edificio. La puerta principal empujada, una sensación de calidez, comodidad, tranquilidad te invade. Así es como nos gusta definir el Grand Hôtel de France: simple, elegante y tranquilizador.